Mi hijo, yo...y la comida!




Salomon, mi hijo,  siempre me ve escribir y pregunta: tu escribes sobre mí cuándo yo vivía en tu barriga?

Mi reflexión después de este tipo de preguntas  se relaciona siempre con la  previa observación de eso que produce sus inquietudes, son interrogantes que yo como madre siempre valoro y considero interesantes. me hacen pensar el doble, cosa que agradece mi cabeza.

Seguido a la primera pregunta y tras haber encontrado respuesta por supuesto, dice: y yo que comía en tu barriga?

y es entonces en este maravilloso punto donde mis inquietudes se sitúan en la dieta de la mujer  la costa atlántica de Colombia, mi país natal, que por cierto es un completo disparate pero del que me siento orgullosa. Que le vamos hacer ! 
Obviamente, mujeres de mi misma clase social, poder adquisitivo, educación, edad, en fin características comunes que nos hacen pertenecer a un mismo grupo.

La costa atlántica produce variedad de frutas tropicales mucho mas que vegetales y  estas obedecen al los cambios estacionarios naturales, sin embargo,  el poco acceso a los vegetales es  lo que llama mi atención, el limitado acceso a eso que nos hace fuertes y sanas, incluso a esa clase de dieta que nos hace mas tranquilas y hasta  positivas. Si señora, pa que lo tenga en cuenta la ingesta de vegetales cambia la energía corporal y no necesariamente usted se tiene que convertir en una asidua vegana para experimentarlo. 

La vaina no es tan sencilla, primero las hortalizas que generalmente van a nuestras ensaladas no crecen cerca de nuestra región y nuestra geografía es y sigue siendo agreste para el transporte de alimentos, cada tantos kilometros se atraviesa una montaña que se cae cuando llueve y en Colombia llueve que da miedo!  por lo tanto lograr que atraviesen nuestra geografía  las encarece. Segundo y clara consecuencia de la primera anotación, pues como son caras sencillamente no se consumen, no pueden entrara a una dieta diaria con los precios por encima de nuestro poder adquisitivo.

Pero no todo esta perdido en este universo de <Economía Vs cuidado corporal>  !!!

Yo aprendí a comer a partir de eso que encontraba en la plaza de mercado y carretillas de mi ciudad natal, Cartagena de Indias (que también es un disparate pero muchos la  queremos con todo y sus desequilibrios) , recuerdo  que durante mi gestación  llegaban carretilleros con una oferta diaria aunque limitada de vegetales y frutas.  Fue fácil empezar de manera creativa a crear  y poner en práctica recetas a partir de eso que era usual tener a la mano: berenjenas, plátano, mango, cebollas rojas o chalotes, solo por mencionar algunos productos.
Para la muestra un botón de esas recetas que amo y que me hacen entretejer un pasado de historia entre libaneses y colombianos, con ustedes La Boronia

para 5 personas

250gr berenjenas peladas y cortadas en cubos
250 gr de plátano maduro  pelado y cortado en cubos

Hogao

75gr cebolla roja
100 gr tomate chonto
ajo al gusto (que carajos póngale mucho es riquísimo)
sal 
pimienta negra molida

preparación: 

Deje hervir los cubos de  berenjena y los plátanos hasta obtener una textura suave tipo puré. prepare aparte sofrito de cebollas, tomate y demás ingredientes, los colombianos a eso le llamamos Hogao en países como España es el típico sofrito.
Luego es muy fácil, mezcle todo hasta obtener un delicioso puré que puede acompañar  desde el desayuno hasta la cena







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